SUSCRÍBETE A NUESTRO BOLETÍN

Aquí pasó algo | Asesinato de Oliverio Castañeda de León

El 20 de octubre 1978, después de la manifestación para conmemorar la Revolución de 1944, Oliverio Castañeda de León fue asesinado en la entrada del Pasaje Rubio, en la concurrida Sexta Avenida de Ciudad de Guatemala. Castañeda de León era el presidente de la Asociación de Estudiantes Universitarios, de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac). Su asesinato sigue impune.

Escucha aquí la cápsula: Explora aquí el especial sonoro de Aquí pasó algo Narradora: En el Centro Histórico de la capital de Guatemala, sobre la peatonal Sexta Avenida que desemboca …


Escucha aquí la cápsula:


Explora aquí el especial sonoro de Aquí pasó algo


Narradora: En el Centro Histórico de la capital de Guatemala, sobre la peatonal Sexta Avenida que desemboca en la Plaza de la Constitución, está el Pasaje Rubio, un pasaje comercial inspirado en la Italia del siglo XVII.      

El edificio tiene dos niveles, cuatro balcones y un amplio  portal de ingreso a los comercios..

Según las imágenes de archivo, y debido a las leyes de protección, el Pasaje Rubio no ha cambiado mucho desde su inauguración en 1930. En sus inicios, las ventanas de la fachada tenían marcos de madera y sobre los comercios del frente destacaban unos toldos metálicos que daban sombra. En el local de la entrada, frente a  la Sexta Avenida, donde ahora, en 2023, hay una venta de donas, pasaron una zapatería, una sastrería y una joyería. Dentro del Pasaje Rubio está el legendario restaurante y bar El Portal, más conocido como El Portalito. Solían frecuentarlo escritores, artistas y políticos, como los expresidentes Juan José Arévalo Bermejo y Jacobo Árbenz Guzmán, el escritor Miguel Ángel Asturias e incluso el Che Guevara.

Pero no todo ha sido compras y festejos en el Pasaje.

El 20 de octubre de 1978, como todos los 20 de octubre desde que asumió el gobierno de Arévalo Bermejo, en Guatemala se realizó una manifestación para conmemorar la Revolución de 1944. Una revolución que significó el comienzo de un cambio político y social y que pondría fin a las dictaduras militares. 

A la manifestación del 20 de octubre del 78 asistieron estudiantes y catedráticos de la Universidad de San Carlos de Guatemala, alumnos de institutos públicos, trabajadores, miembros de organizaciones sindicales y de la sociedad civil. Marcharon desde el Monumento al Trabajo, en la zona 5, hasta la Concha Acústica, en el Parque Centenario. 

Al mediodía, cuando ya había terminado la manifestación, se escuchó una balacera. La gente corrió, espantada. 

Aquí, en el ingreso del Pasaje Rubio, el líder estudiantil Oliverio Castañeda murió asesinado. Era el presidente de la Asociación de Estudiantes Universitarios, de la Universidad de San Carlos. 

Si bajas la mirada, en el piso del ingreso, verás una placa de bronce en la que se lee: «Aquí fue vilmente asesinado el estudiante universitario Oliverio Castañeda de León». Cada 20 de octubre, coronas de flores y claveles rojos adornan esta placa.

***

Iduvina Hernández: Soy Iduvina Hernández Batres, mujer guatemalteca, defensora de derechos humanos, he ejercido el periodismo. Fui participante y dirigente el movimiento estudiantil universitario de los años 70 en la Universidad de San Carlos de Guatemala. En ese espacio me encontré, conocí y entablé una amistad muy entrañable con Oliverio Castañeda de León. 

Integramos el secretariado de la Asociación de Estudiantes Universitarios que tomó posesión el 22 de mayo de 1978. 

Había cumplido 23 años, justo en el período en el que se dieron en ese año, precisamente, lo que se llegó a conocer como las jornadas de octubre, en las que hubo una movilización en la ciudad de Guatemala y en varios puntos del país, en protesta por el alza al precio del transporte urbano. 

Aunque le habíamos planteado que no asistiera a la manifestación del 20 de octubre, porque había salido un boletín del supuesto Ejército Secreto Anticomunista, en el cual se le amenazaba de muerte. Oliverio planteó que era su deber asistir a la marcha. Se incorpora a la marcha hasta llegar a la Concha Acústica, donde se incluye en la lista de oradores de ese día. Fue el último orador del mitin.

Cuando Oliverio termina diciendo, con su voz ronca, «Podrán masacrar a los dirigentes, pero mientras haya pueblo, habrá revolución». Esa frase que ha crecido a lo largo de las décadas que han transcurrido, sonó muy fuertemente ese día. Yo recuerdo estarlo escuchando desde la base, abajo, oyéndolo emitir su discurso. Recuerdo que había un silencio profundo.

Habíamos acordado encontrarnos para almorzar varios amigos, entre ellos iba a llegar Oliverio, a la casa de otro amigo para que nos reuniéramos después de la manifestación.

Mi compañero y yo nos retiramos del lugar en la moto que manejaba mi compañero. Íbamos sobre la cuarta avenida de la zona 1, en la moto, escuchamos como si hubieran quemado cohetes. 

Llegamos al punto donde nos íbamos a encontrar, estuvimos esperando y Oliverio no llegaba. Dos personas que estaban en la casa salieron a comprar comida y se encontraron con alguien que les informó lo que había sucedido. Entonces retornan a la casa y nos avisan, que acababa de producirse el asesinato de Oliverio. 

El ingreso al Pasaje Rubio en la sexta avenida es el sitio en donde Oliverio Castañeda de León cayó asesinado por las balas, que provenían de un comando de las fuerzas de seguridad del gobierno de Guatemala. 

Fueron momentos muy dolorosos, muy duros de enfrentar. Y por supuesto de dar la batalla por denunciar su asesinato y dar inicio al proceso de exigencia de justicia. Han pasado prácticamente 45 años desde ese momento y en realidad no hay justicia por ese caso. No se abrió ningún proceso penal.

Mantener viva su memoria, pero sobre todo el legado del compromiso y la búsqueda de construir un proceso de participación, que reivindique el sentido y el contenido de la lucha que Oliverio le imprimió a su vida, a una vida joven, prometedora, truncada por la estrategia contrainsurgente, que acabó con una buena parte del liderazgo social y político en Guatemala. El legado de lucha de Oliverio yo lo veo presente en cada expresión de la resistencia ante el asalto a la democracia en Guatemala.

***

Narradora: ¿Quieres escuchar lo que pasó en otros lugares? Si estás haciendo un recorrido presencial, puedes caminar hacia la segunda avenida y 11 calle y buscar el código QR. Ahí te contaremos del secuestro del escritor y maestro Luis de Lión.

Si haces el recorrido digital, puedes escuchar las demás cápsulas en agenciaocote.com o en tu plataforma de audio favorita. También puedes explorar el mapa para ver otros lugares.

Angélica Medinilla

También te puede interesar

CONTAMOS LA
REALIDAD DESDE MIRADAS DIVERSAS

SUSCRÍBETE A NUESTRO BOLETÍN

La realidad
de maneras diversas,
directo a tu buzón.