Rina Lazo: Murales de la cosmovisión maya que trascienden fronteras

La vida y obra de Rina Lazo Wazem están marcadas por el tránsito entre territorios y culturas. Desde su infancia en Cobán, influenciada por la tradición oral maya, hasta su consolidación en el muralismo mexicano junto a Diego Rivera, su arte es un reflejo de la identidad, la resistencia y el intercambio cultural. A través de murales vibrantes, Lazo transformó la memoria en un testimonio visual que conecta pasado y presente.

Desde su nacimiento en la Ciudad de Guatemala en 1923, Rina Lazo estuvo influenciada por diversas culturas. Su ascendencia alemana y su crianza en Cobán, Alta Verapaz, un entorno con …

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En resumen:

  • Nacida en Guatemala y formada en México, Rina Lazo construyó un puente artístico entre ambas culturas. Ha incorporado la cosmovisión maya en el muralismo mexicano del siglo XX.
  • Su temprana exposición a la cultura Q’eqchi’ en Cobán marcó su imaginario artístico. Transformó la tradición oral maya en poderosas imágenes que plasmó en sus murales.
  • La migración fue un catalizador de su desarrollo artístico. Le permitió colaborar con Diego Rivera y crear obras emblemáticas como Tierra fértil y Xibalbá, el inframundo de los mayas.

Desde su nacimiento en la Ciudad de Guatemala en 1923, Rina Lazo estuvo influenciada por diversas culturas. Su ascendencia alemana y su crianza en Cobán, Alta Verapaz, un entorno con una fuerte presencia maya Q’eqchi’, le dejaron huella.

El cuidado que recibió de mujeres Q’eqchi’ durante sus primeros años de vida la conectó con tradiciones y creencias ancestrales. 

Su infancia transcurrió entre cuentos de leyendas y creencias que escuchaba de las trabajadoras en Cobán. Una de ellas fue María Teresa Chiquín, su cuidadora. 

En su juventud su amistad con la pintora Carme Neutze y las clases de pintura con el maestro Julio Urruela (creador de los vitrales del Palacio Nacional), iniciaron su formación.

Cuando tenía 21 años, en 1944, entró a la Academia Nacional de Bellas Artes. En un contexto de revolución política y social, Lazo fue testigo de tensiones y transformaciones de Guatemala. 

A sus 23 años, Rina Lazo recibió del presidente Juan José Arévalo el reconocimiento que la llevó a estudiar arte a la ciudad de México. Foto: Abel Santiago

En su visita a Guatemala en 2010 para la exposición Oh, Revolución 1944-2010,  relató sobre el día en que presenció el inicio de la gesta.

Según su relato, mientras salía de la academia presenció el levantamiento que también dejó huella en su compromiso social.

Con el primer gobierno de la Revolución, su talento fue reconocido en un concurso del Ministerio de Educación en 1946. Obtuvo una beca de año y medio para estudiar pintura en México. 

La obra que Lazo presentó al concurso, titulada Naturaleza muerta con Xipe, incluyó una escultura prehispánica de Xipe Totec. Esto muestra su interés desde la juventud por el mundo mítico de la cultura mesoamericana. 

Tenía 23 años cuando el presidente Juan José Arévalo le entregó el reconocimiento.

México: su segundo hogar

En México no solo terminó de formarse como artista. También estableció vínculos significativos con figuras clave del muralismo mexicano. Como Diego Rivera

La amistad y colaboración con Rivera, esposo de Frida Kahlo, fueron fundamentales para Lazo. Participó en la creación de murales emblemáticos como La Gloriosa Victoria, donde se retrató «la resistencia del pueblo guatemalteco» durante la invasión de 1954. 

La influencia de Rivera también la llevó a unirse al grupo de Jóvenes Artistas Revolucionarios, donde conoció a Arturo García Bustos, con quien se casó en 1949.

García Bustos, un destacado grabador y muralista, fue conocido como uno de «los Fridos» por ser discípulo de Frida Kahlo.

Esta unión no solo representó una alianza personal, sino también una colaboración creativa. Así, su vida se entrelazó con la historia emblemática del arte mexicano del siglo XX. 

Retorno temporal a Guatemala

En 1953, Lazo y García Bustos se trasladaron a Guatemala atraídos por el gobierno de Jacobo Árbenz. 

Los años que estuvieron en Guatemala, Lazo realizó Tierra fértil el único mural que creó en su país. Esta obra, cuyo tema central es la vegetación en conexión con su gente, refleja la conexión culturas.

Este mural, aún hoy, sigue ubicado en el Museo de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Musac), en el Centro Histórico de la capital.

Tierra Féttil el único mural que Rina Lazo creó en Guatemala y se exhibe en el Musac. Mide 4.8 X 3 metros. Foto: Rina Lazo

Es así como la obra de Lazo se convirtió en un archivo de la memoria. Representa la belleza de la cultura y el territorio maya en conexión con la artista.

Desarrolló un estilo artístico original. Lo caracterizó su aguda capacidad de observación, el uso de metáforas poéticas, una paleta de colores vibrantes y, sobre todo, su conocimiento con la cultura maya.

Su dedicación a la representación de la cultura maya en el muralismo fue un logro destacado en un ámbito predominantemente masculino.

El mural como denuncia social

El arte muralista mexicano del siglo XX, con figuras como Diego Rivera y sus discípulos, no solo fue una expresión estética, sino también un poderoso instrumento de denuncia social. 

Tras su formación con Rivera, Lazo se involucró en proyectos murales en comunidades rurales de México en la década del cuarenta.

Las comisiones murales en Atencingo, Puebla, y Temixco, Morelos, no fueron meros encargos artísticos. Obras como Los cuatro elementos o Venceremos muestran la fuerza política de su trabajo.

El Partido Comunista Mexicano, del cual Lazo y su esposo fueron miembros hasta la década del sesenta, buscaba a través del arte sobre la vida de los obreros y trabajadores del campo, despertar la conciencia política. 

Al convivir con los campesinos de Puebla y Morelos, Lazo y su esposo presenciaron de primera mano la represión contra líderes comunitarios de parte del Estado.

Xibalbá: el último viaje a la memoria

Xibalbá, el inframundo de los mayas (2019), la última obra de Rina Lazo, se presenta como la síntesis de una vida marcada por la migración y su conexión con la memoria. 

Este mural, que terminó el año que murió, revela los recuerdos de infancia de Lazo en Alta Verapaz. 

Rina Lazo junto a su última obra, en su estudio en México. Xibalbá el inframundo de los mayas fue revelado en 2019, año del fallecimiento de la artista. Foto: Fátima Anzueto

Sus visitas de niña a las grutas de Candelaria, un espacio geográfico importante en su memoria, sirvieron para la representación del inframundo maya.

El complejo subterráneo, descubierto oficialmente en la década del 70, motivó a Lazo a refrescar su memoria y plasmar su obra final.

Rina Lazo murió el 1 de noviembre de 2019 en Coyoacán, Ciudad de México. Su vida y su obra son testimonio de la movilidad humana y el intercambio cultural en Mesoamérica.

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