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Banquetes de Guatemala intentó seguir vendiendo comida a la SBS por Q42 millones a pesar de la intoxicación de las niñas

La empresa Banquetes de Guatemala, conocida comercialmente como Presto y como Condimenta, sirvió alimentos contaminados a los hogares de protección de la Secretaría de Bienestar Social. A meses de vencerse la prórroga de su contrato, fue la única empresa que concursó para seguir prestando el servicio de alimentación los próximos dos años, a cambio de Q42 millones. Aunque la institución se negó, Banquetes de Guatemala siguió insistiendo.

Banquetes de Guatemala, la empresa denunciada por vender alimentos con listeria en hogares de protección estatal y servir comida con moho, trató de ampliar su contrato por un año más.  …

  • La empresa Banquetes de Guatemala insistió en seguir vendiendo alimentos después de servir comida con listeria a niñas y adolescentes de un hogar de la Secretaría de Bienestar Social. 
  • La sociedad hizo una oferta a la SBS por más de Q42 millones.
  • Entre los argumentos de la secretaría para rechazar la propuesta está el hecho de que encontraron cucarachas y varias deficiencias en sus plantas.

Banquetes de Guatemala, la empresa denunciada por vender alimentos con listeria en hogares de protección estatal y servir comida con moho, trató de ampliar su contrato por un año más. 

El contrato más reciente había iniciado en agosto de 2023 y finalizó el 30 de abril de 2024, pero antes de que venciera, la Secretaría de Bienestar Social (SBS) autorizó una prórroga por diez meses más, hasta febrero de 2025. 

Según dijo la SBS a Ocote, esta prórroga se justificó porque realizar un nuevo contrato demoraría demasiado tiempo y dejaría sin el servicio de alimentación a los hogares de protección y centros de privación de libertad. 

Una vez asegurado el servicio para este año, en julio de 2024 —tras la intoxicación de las niñas—, la SBS ofertó en Guatecompras un nuevo evento por 12 meses (entre 2025 y 2026) para 12 hogares de protección, seis centros de privación de libertad para adolescentes y cuatro oficinas del departamento de seguridad de la SBS.

Pero la única empresa que ofreció prestar el servicio fue la misma que lo había hecho hasta ahora; la que sirvió alimentos contaminados: Banquetes de Guatemala, S.A. Hizo una oferta de Q 42,339,382.50

Las razones para rechazar a Banquetes de Guatemala 

La junta de licitación integrada por Mónica Mariela Mayorga Ayala, Oscar Avily Werner Ruíz y Leslie Elizabeth Urizar Cordero decidió no adjudicar el contrato a Banquetes de Guatemala.

Se basaron en seis razones. 

Una de las más contundentes fueron los antecedentes ocurridos en 2024 de los alimentos contaminados y servidos en malas condiciones a los hogares para niñez y adolescencia que debe proteger el Estado, que Ocote hizo públicos en este reportaje

Otro motivo fueron los hallazgos de las visitas realizadas en 2024 a las plantas de producción de la ciudad de Guatemala y del departamento de Quetzaltenango

Según quedó registrado en las páginas de la 9 a la 13 del acta 008-2024 de revisión, calificación y adjudicación del evento, en dos de estas visitas encontraron cucarachas en las plantas.

Las primeras fueron en la planta de producción de la zona 14 de ciudad de Guatemala, en el interior de uno de los vehículos que la empresa utiliza para distribuir los alimentos. Otro de los animales se encontró en el congelador donde se guardan las carnes en la planta de producción de la zona 11 de Quetzaltenango. 

Además, en las visitas también ubicaron deficiencias, sanitarios próximos a la bodega seca, falta de ventilación en una bodega, espacio físico inadecuado para lavar los recipientes y utensilios de cocina.    

El nombre de la empresa fue otra razón para declinar la oferta. Banquetes de Guatemala S.A solía utilizar el nombre comercial «Presto». A veces, también usa «Condimenta» y la documentación la presentó con el membrete de esta última.  

Cuando se creó la empresa, en el acta de constitución se acordó su primer nombre comercial (Comidas Presto), pero se dejó también establecido que podría usar más nombres comerciales. 

En total tiene 16: 

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Al no recibir la adjudicación, la empresa presentó una inconformidad. Negó lo expuesto por la junta de licitación y argumentó que en la decisión se utilizaron condiciones que no son motivos de descalificación.

«Los criterios subjetivos que se realizan en un documento de carácter público comprometen el prestigio y seriedad con la que se conduce mi representada frente a situaciones similares y que de acuerdo con las condiciones contractuales y protocolos de contingencia han sido resueltos», alega Socer Arnoldo de León Gómez, que en ese momento era representante legal de Banquetes de Guatemala.

Sobre el uso del nombre Condimenta, basándose en los artículos 87 y 337 del Código de Comercio, de León Gómez manifestó en el expediente que es posible tener otros nombres comerciales, ya que la denominación social y el nombre comercial son conceptos legales diferentes. 

Ocote consultó a Carlos Gossmann, economista senior y coordinador del área de presupuestos públicos y Derechos Humanos del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), por qué las empresa suelen tener tantos nombres comerciales.

El economista explica que esto suele ocurrir en corporaciones muy grandes, con varias empresas cuya cadena de producción está vinculada. Facturan entre ellas mismas y generan mecanismos de precios «sombras».

«No se trata de una evasión. Es una ilusión, porque están utilizando mecanismos dentro del marco legal que les permiten hacer eso, ya sea porque existe el vacío legal o porque la misma ley se los permite. Es una forma de aprovecharse», dice Gossman. 

«Lastimosamente, existen vacíos legales», añade. «La Ley de Contrataciones no llega hasta esos alcances de regular este tipo de acciones. No existe dentro del marco legal algo que restrinja esto y es muy común verlo». 

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De León Gómez presentó el documento de protesta en septiembre de 2024, cuando aún estaba registrado como gerente general de Banquetes de Guatemala, aunque un mes después esto cambiaría. Según la información del Registro Mercantil recopilada por Ocote, desde el 22 de octubre de 2024 el gerente general de la sociedad es Erwin Otoniel Belteton Fajardo. 

Aunque ya no es el gerente general, De León Gómez aún aparece ligado a la empresa como administrador único.

Ocote solicitó una entrevista a Banquetes de Guatemala por medio de Gloria Morán, una trabajadora a quien personal de la empresa refirió para poder agendarla. El 16 de octubre de 2024, Morán informó que el vocero autorizado estaba de viaje. 

El 13 de enero de 2025 Ocote hizo de nuevo la solicitud de una entrevista a la empresa a través del personal de su oficina. La mujer que atendió la llamada indicó que contactarían al medio. Algo que al cierre de edición de este texto no sucedió.       

Fotografía: SBS

La protesta del entonces gerente de Banquetes  quedó registrada en el documento que presentó de inconformidad ante la decisión de la junta de licitación.  

La inconformidad fue rechazada y declarada improcedente. 

«Como institución que coadyuva a la restitución de derechos de las niñas, niños y adolescentes que atiende, debe velar porque los alimentos que consuman no representen un riesgo para la salud, debiendo asegurar el consumo de alimentos frescos y en buen estado», resolvió la junta de licitación en el acta de revisión, calificación y adjudicación del 29 de agosto de 2024

Para rechazar a Banquetes de Guatemala, la Secretaría de Bienestar Social argumentó que debía garantizar que los alimentos no fueran un riesgo. Pero, a pesar de esto, a día de hoy la empresa sigue prestando los servicios de alimentación a  hogares y centros de la SBS.

¿Por qué no se rescinde el contrato con Banquetes de Guatemala?

El argumento de la Secretaría de Bienestar Social para no cancelar el contrato vigente con la empresa es que, si lo hace, dejaría sin alimentación a los niños, niñas y adolescentes a su cargo. 

Según María José Ortiz Samayoa, subsecretaria de protección y acogimiento de la niñez y adolescencia de la SBS, la entidad ha tenido dificultades para encontrar otras empresas que presten el servicio. Ocote detalló esta información en este reportaje.

Ante esta situación, Carlos Gossmann, del ICEFI, considera que lo que sucede con esta empresa tiene un trasfondo que «podría dar tintes de corrupción». Para el economista hay dos elementos que lo respaldan: el hecho de que a la compañía le hayan renovado los contratos y que tenga tanta participación dentro del sector público.

Sirve alimentos a al menos 30 instituciones del Estado, entre las que está el Ministerio de Desarrollo Social, el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social y Instituto Guatemalteco de Migración.

«Si ellos ya cometieron errores en el sentido de que prestan un producto de mala calidad, lo que se debe hacer es pasar por un proceso de evaluación, que ya lo tuvieron que haber hecho, y rescindir de su contrato. Cualquier empresa de alimentos no puede poner en riesgo la salud de ningún ser humano», recuerda Grossman. 

Aunque el analista admite que rescindir un contrato no es tan sencillo en la práctica. 

Deben existir cláusulas en el mismo, donde se especifique la situación explícitamente como un motivo para cancelar un contrato. En el contrato que fue renovado por la SBS, provocar una intoxicación o servir alimentos en mal estado no es explícitamente una causa de rescindir el contrato. Pero sí se habla del tema a través de una sanción, que consiste en pagar los gastos médicos. 

Ortiz Samayoa, la subsecretaria, aseguró a Ocote que la empresa pagó los medicamentos de las niñas ingresadas en mayo de 2024.

Según Gossman, es importante que, en todo caso, el Estado cuente con todos los recursos para defenderse legalmente. En este caso, sería con los dictámenes del Ministerio de Salud. «Hay que considerar los mecanismos legales que pueden utilizar las empresas ante demandas contra el Estado por incumplimiento de contrato. También es factible», explica. 

El economista hace énfasis además en que la SBS tiene el compromiso y la obligación legal de no dejar un día a los niños, niñas y adolescentes sin comer. Además de la responsabilidad que establece la ley, hay un amparo otorgado por la Corte Suprema de Justicia que obliga a la secretaría a garantizar el servicio de alimentación.

En cuanto a realizar un nuevo contrato, Gossman recuerda que en la administración pública existen procesos para licitar y es complicado que inmediatamente se cuente con una empresa que preste el servicio cuando otra lo deja de hacer. 

«Esta empresa puede ser la única que cumplió los requisitos de la licitación cuando salió la oferta. Puede que existan otras empresas que podrían cumplir, pero hay que considerar que no todas tienen interés o intención de trabajar con el Estado», concluye.

Las alternativas

Después de negar el nuevo contrato, en el que Banquetes de Guatemala ofreció Q42 millones, la SBS ofertó de nuevo el servicio en diciembre de 2024, pero esta vez de forma diferente. Separaron a los hogares de protección de los centros de reinserción. 

Los eventos están vigentes hasta el 30 de enero para Quetzaltenango y hasta el 4 de febrero para Guatemala. Se puede acceder a ellos en Guatecompras con los NOG: 24572802 para Quetzaltenango y 24569267 para Guatemala.

En el caso de los centros de reinserción, Banquetes de Guatemala volvió a presentar su propuesta. También lo hizo la empresa Sistemas Nutricionales SA. Al cierre de este texto la compra estaba en evaluación. 

En los hogares de protección, la SBS ofrece el servicio por regiones. Dividieron a Guatemala de Quetzaltenango para que exista la posibilidad de que empresas locales puedan ofrecer sus servicios. 

Si no hubiera otras opciones de proveedor, la SBS toma en cuenta algunas alternativas, según explicó a Ocote la subsecretaria María José Ortiz. 

La primera es que cada hogar cocine sus alimentos. Para esto deben tener la infraestructura, el equipamiento y el personal. La subsecretaria Ortiz informó que la implementación de esta alternativa ya se está trabajando en tres hogares. 

El Hogar Tejiendo Sueños, la nueva casa que inauguró la SBS el 1 de octubre de 2024; el hogar Diamante II y tentativamente se tiene contemplado el hogar Zafiro IV, aunque este último aún no tiene la infraestructura adecuada. 

Existen hogares a los que no se les presta el servicio porque tienen implementada la cocina y elaboran sus propios alimentos. La subsecretaría tiene a su cargo 19 hogares y 2 albergues, Banquetes le presta el servicio a 14. En los demás se cocina en sus instalaciones. 

Fotografía: SBS

«Los procesos de contrataciones del Estado son complejos. Un pequeño proveedor no siente atractivo ofrecerle al Estado. Debe tener un capital que le permita esperar los tiempos para el pago que lleva un trámite. No cualquiera tiene la capacidad instalada para esperar a que se le haga efectivo el pago» dijo María José Ortiz.

Por ahora, y hasta febrero de 2025, la empresa Banquetes de Guatemala tiene garantizado que dará los servicios de alimentación a la SBS, a pesar de que la misma secretaría ha admitido que la comida que entrega a la los hogares de protección y los centros de privación de libertad es un riesgo para la salud.

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Créditos:

Investigación y redacción: María José Longo Bautista 

Edición: Carmen Quintela

Diseño: Oscar Donado  

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María José Longo Bautista

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