Aquí pasó algo | Desaparición de Judith Marlene Gularte

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Lee aquí la transcripción del episodio:

Sobre la calzada San Juan, debajo del puente de La Brigada, en la zona 7 de Mixco, el movimiento es constante: algunas personas esperan el bus; otras cruzan, de manera intrépida, la calle de cuatro carriles; y unas pocas intentan parar un taxi. 

Aunque en los años ochenta este puente no existía, hoy es un punto de referencia claro: por aquí circulan decenas de buses que vienen desde San Juan Sacatepéquez hacia la capital de Guatemala.

Si te colocas en este punto bajo el puente, en la dirección de los autos que van  a la ciudad, verás a tu derecha y un pequeño callejón, que conecta la calzada con la colonia La Brigada. 

A los lados, a mediados de 2025, hay pequeños talleres, una venta de tornillos y un lugar en donde venden chicharrones. El olor de la grasa se mezcla con el humo del tráfico, que también se queda pegado en las paredes de los negocios: una mezcla de gris y negro cubre los colores vivos de estas fachadas.

En esta vía, la calzada San Juan,  por donde circulan miles de vehículos al día, en medio del bullicio, el 6 de junio de 1981 fue desaparecida Marlene Gularte, maestra y sindicalista. Marlene estaba embarazada de seis meses cuando fuerzas de seguridad del Estado se la llevaron por la fuerza. 

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José Paz: Mi nombre es José Roberto Paz Gularte, soy antropólogo y Marlen Gularte era mi madre.

Mi mamá era la hija de una familia de cuatro hijas,era la más pequeña. Desde su juventud siempre fue una una mujer muy aventurera, tuvo mucha formación religiosa católica. Sin embargo, también le gustaba mucho participar en organizaciones como las muchachas guías, los scouts. 

Una mujer muy amante de la naturaleza y su formación era maestra. También muy entregada a la niñez, le gustaba mucho la enseñanza principalmente para niños de primaria. Tenía una vocación artística muy fuerte, pintaba, dibujaba.

Yo tenía dos años cuando desaparecieron a mi mamá y yo tengo muy, muy pocos recuerdos personales. La memoria que yo tengo de ella es a partir de la recolección de testimonios y de imágenes y de recuerdos de mi familia, de sus amigos, de sus compañeras de trabajo, pero sí, yo en lo personal no tengo recuerdos de ella. 

Sin embargo, pues de lo que me han contado fue una persona muy alegre, muy comprometida, ¿verdad? Y también con un pensamiento bastante crítico sobre lo que sucedía y también muy organizada. 

Mis papás estaban organizados a nivel magisterial, la organización a la que pertenecían era el Frente Magisterial de Guatemala. Aparte de eso, dos eran militantes de la Organización Revolucionaria del Pueblo en Armas, ORPA. Sin embargo, mi mamá cuando se embaraza se retira por un momento de la organización y mi papá empieza a ser perseguido.

El día en que a ella la desaparecen unos días anteriormente llega un amigo de mis padres que había sido detenido, desaparecido. Llega a las afueras de la casa acompañado con dos personas que estaban armadas. Era obvio que había sido secuestrado y que lo estaban llevando para enseñar la casa.

En ese tiempo mi papá ya había salido al exilio, sin embargo, mi mamá se había quedado porque ella estaba esperando a mi hermano o hermana. Tenía seis meses de embarazo. Entonces, por lo próximo que estaba el parto, pues, no había logrado salir del país.

Nunca dimensionaron ellos que mi mamá iba a ser un objetivo y al día siguiente de eso ella sale. Y precisamente la iba acompañando la señora que trabajaba con nosotros y yo, me llevaba en brazos. Y ella detecta que hay personas que la están vigilando. Entonces, ella le dice a la señora que me lleva que se regrese a la casa. Dos cuadras más adelante se detiene un vehículo, bajan varias personas armadas. Hay testigos en que mi mamá se defiende con una sombrilla. Se trata de esconder en una farmacia que está abierta y haciendo un escándalo para que la gente la viera. Era la directora de la escuela del barrio, entonces era una persona conocida, ¿verdad? Sin embargo, las personas con toda violencia la sacan de la de la farmacia, la golpean, la meten al vehículo y la secuestran.

La familia entera empieza a buscar a mi mamá, sus hermanas, mis abuelos, mis tíos, los hermanos de mi abuelo empiezan un proceso de búsqueda, ¿verdad? Visitan morgues, hospitales… Se sospechaba de que podría haber sido un secuestro económico. No se sabía nada en esos momentos. Mi abuelo tenía muchos contactos en el gobierno. Empieza a hacer uso de ellos, ¿verdad? Pero nadie, nadie le da razón de lo que lo que había pasado con mi mamá.

Mi familia nunca abandonó la lucha, ni la esperanza de saber qué fue lo que pasó. Es algo inculcado desde mis abuelos, desde mi hermano, desde mis tías. La necesidad de saber qué fue lo que pasó. Es una semillita, el amor, el cariño por el ser perdido, el ser querido que se llevan, hace que uno tenga esa semilla, esa inquietud de saber qué es lo que pasó. Qué fue, quiénes fueron los que le hicieron eso. A dónde se la llevaron.

La búsqueda es por dos personas, ¿verdad? Queremos encontrar a nuestro ser querido, si está vivo o no está vivo, si creció o no creció, si nació o no nació. Pues, eso lo queremos. No se puede olvidar tan simplemente. Es parte fundamental de la búsqueda, tanto de mi mamá como de su hijo o hija.

Lo que hemos averiguado, pues confirma siempre lo que ya se sabía, fueron las fuerzas de seguridad las que desaparecieron a mi mamá, ¿verdad? Fuerzas vinculadas principalmente con la Policía y bueno también con implicaciones del Ejército. Eso es lo que hemos ido averiguando. En realidad es algo que ya todos sabíamos.

Mi mamá era una persona justa y  una persona que valía mucho. Y eso es sumamente importante, pues lo hace a uno exigir justicia. Todo ser humano merece justicia por muy malo que sea y la gente que ha sido valiosa, pues la merece más.

A nivel de país se perdió una gran maestra, formadora de la niñez. Se perdió una artista, se perdió una dirigente magisterial muy comprometida y con mucha conciencia social. Se perdió muchas cosas y a nivel familiar, pues perdimos mucho y a pesar de que hayan pasado ya 44 años, nos sigue haciendo mucha falta.

Siento que mi mamá perteneció a una generación muy comprometida con la sociedad, cosa que se ha perdido mucho. El individualismo ha permeado muy fuerte a la sociedad guatemalteca y esto ha provocado en gran parte que también estemos viviendo estas condiciones tan tan desiguales.

La generación de mi mamá fue muy valiente en momentos claves del país. Fue gente que no luchó para sí mismas o para su familia, sino que tenían una perspectiva importante para la sociedad y eso es de mucho peso. Creo que la generación de mi mamá fue una generación que hay que rescatar precisamente del olvido. Es una generación que hay que valorar, hay que valorar su entrega, su valentía, su compromiso ante una sociedad que requiere de su ayuda.

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¿Quieres escuchar lo que pasó en otros lugares? Si estás haciendo un recorrido presencial, puedes continuar por la zona 1 de Guatemala y buscar los códigos QR. En varios puntos te hablaremos de los lugares en donde secuestraron y asesinaron a otros líderes estudiantiles y sindicales durante el conflicto armado interno. Explora el mapa en agenciaocote.com.

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