Alejandro Giammattei presentó su Informe de Gobierno de 2022  el 14 de enero. La sección de Gobernabilidad y Seguridad en Desarrollo contiene un apartado llamado «Reducción de la incidencia criminal», un indicador con el que se mide la cantidad de delitos registrados por cada 100 mil personas. 

De acuerdo con el informe, «en 2022 se registró un alza de 4.16 puntos con relación al año anterior, para una tasa de 93.35 por cada 100,000 habitantes». Sin embargo, enfatiza en que entre «2020 a 2022 hubo una reducción de 7.28 puntos en relación con el año 2019» cuando se tuvo una tasa de 100.63.

Aunque es verdad que en 2020, el año en que Giammattei llegó a la Presidencia, y con el encierro de la pandemia, las cifras de criminalidad descendieron; a partir de 2021 la incidencia criminal ha ido en aumento.  

En 2020, la tasa registrada fue de 82.77 y en el 2022 fue de 93.35, es decir un aumento de 10 puntos en tres años. 

Carlos Menocal, ministro de Gobernación durante el gobierno de Álvaro Colom, explica que esto significa que ha habido aumentos en los robos a viviendas, robos a transeúntes, estafas y extorsiones.  

«Esto es resultado del debilitamiento de la Policía Nacional Civil que empezó desde el gobierno de Jimmy Morales, a través de la destitución de comisarios y otras autoridades de la institución», afirma el exfuncionario. 

Según datos obtenidos por Ocote, por medio de la Ley de Acceso a la Información Pública, las extorsiones han aumentado en Guatemala en los últimos tres años. En 2020, la Policía Nacional Civil registró 13,031 casos, en 2021 fueron 13,288; y el año pasado se contabilizaron 13,629. 

Ocote le consultó a la presidencia sobre el aumento en la incidencia criminal durante los últimos dos años, pero hasta la publicación de la nota no se recibió una respuesta